¿Cómo cuidar tus guantes de portero?

¿Cómo cuidar tus guantes de portero?

Seguro que si preguntáramos a Camuñas por sus guantes, nos diría que son uno de sus bienes más preciados. Los guantes de portero protegen las manos de lesiones y ayudan a detener el balón y, como ocurre con las botas, tienen una vida limitada. Se desgastan por el uso y la humedad, así que vamos a ver qué hacer y qué no para su mantenimiento.

3 consejos para que tus guantes duren más

  1. Procura tener dos pares de guantes: uno para entrenar y otro para los partidos. Si siempre usas los mismos, se romperán antes. Puedes utilizar durante los entrenamientos un par antiguo o más barato (con menos agarre, pero mayor durabilidad), y reservar tu mejor par de guantes para jugar.
  2. Intenta no apoyar la palma de las manos en el suelo cuando los lleves puestos para evitar su desgaste y problemas de agarre. Aprende a levantarte con el puño cerrado o impulsándote con el antebrazo. También puedes llevar contigo una toalla a la portería para limpiar las palmas, especialmente en campos de tierra. ¡Ojo! Algunos porteros se suben continuamente las medias y este gesto deteriora el látex de la punta de los dedos. ¡Cuidado también con el velcro!
  3. Después de la erosión, el agua es el peor enemigo de tus guantes. Sin embargo, algunos materiales necesitan humedecerse para jugar mejor y, en ocasiones, llueve durante el juego. Sea como sea, tras el partido deben secarse bien antes de guardarlos.

Cómo cuidar tus guantes de portero

¿Cómo lavar tus guantes?

El polvo, la suciedad y el sudor atacan tus guantes cada vez que los usas, por eso hay que limpiarlos luego. Nota importante: nunca laves los guantes en la lavadora. Parecerá que salen relucientes, pero se habrán dañado sin remedio y poco después tendrás que comprar otros.

A menudo será suficiente con humedecerlos y frotarlos con suavidad después de un partido. Sin embargo, en otras ocasiones acabarán con barro o muy sucios, por lo que tendrán que pasar por el agua. Usa agua tibia con poca presión y un jabón neutro o específico para guantes. Lávalos metiendo la mano de uno en uno hasta eliminar toda la espuma Si fuera necesario, puedes quitar la suciedad con un cepillo de dientes suave. Luego, presiona poco a poco para escurrir el agua. ¡Cuidado! No los retuerzas.

Déjalos secar al aire libre. No es buena idea ponerlos al sol o sobre un radiador. Tampoco secador o secadora, pues se estropearían. Un truco consiste en envolverlos en papel de periódico y esperar.

Este trámite es muy importante porque la humedad y ciertas bacterias pueden hacer que tus guantes huelan mal o que aparezcan hongos. Una vez secos, guárdalos en una funda que transpire en un ambiente fresco y poco húmedo. Si pones las palmas juntas podrían pegarse y luego rasgarse al separarlas, y no queremos eso. Lo mismo con el dedo pulgar contra la palma. Lo ideal sería poner cada uno en una bolsa individual, pero si no es posible, usa papel de barrera para que el látex no se pegue. Y así, al armario hasta el próximo partido.

0 Comentarios en

¿Cómo cuidar tus guantes de portero?